La búsqueda constante por ahorrar tiempo ha hecho que aparezcan alternativas y servicios que nos lleven a optimizar este recurso hoy tan importante, es así que el reparto a través de motos es uno de los servicios más usados y requeridos, La demanda en aumento de este tipo de servicios, que nos es malo, hace que sea importante una evaluación de la seguridad y se tomen algunas precauciones a fin de minimizar riesgos.
En primer lugar, deberíamos tener en claro los dos tipos servicios que hoy funcionan en el mercado:
a) Delivery que nace de un requerimiento de reparto y la empresa designa al repartidor
b) Delivery que nace de la solicitud a través de un aplicativo donde el servicio de reparto es aceptado por el mensajero que se encuentra cerca
La diferencia entre uno y el otro es que en el primer caso: la empresa a quien uno hace la solicitud, designa al repartidor, por consiguiente tienen un control de quien va a efectuar el servicio y lleva un registro del personal que cubre esta necesidad. En el segundo caso: es el repartidor que acepta hacer el servicio a través de la aplicación, no hay vínculo con la empresa proveedora del aplicativo, al principio hubo un filtro que generó un código de acceso para el mensajero, la asignación queda registrada en la plataforma, el repartidor no está instalado en ningún punto fijo, lo único que «lo identifica» es la caja de color llamativo que lleva en su moto y que se puede adquirir a través de internet en S/ 100.00 Cien Nuevos Soles.
En ambos casos hay una exposición al riesgo que debemos tener en cuenta para minimizarlo:
1.- Si el edificio no tiene conserje y se le permite el acceso hasta la puerta del departamento, cuando el repartidor se retira puede cruzarse con una persona en la puerta que le indique que es «propietario» y sea el repartidor el que lo deje pasar brindando el acceso al edificio.
2.- Puede el repartido dejar intencionalmente o por descuido la puerta mal cerrada o abierta
3.- La permanencia de la moto por varios minutos en la puerta del edificio (que es el tiempo que se toma llegar al departamento) genera el riesgo de que pueda ser esperado el repartidor a la salida para ser interceptado y así tener el acceso al edificio.
4.- Al permitir el acceso al repartidor (delivery) se está permitiendo el acceso a una persona desconocida que puede tomar conocimientos de los sistemas de seguridad, movimientos y costumbres así como el status de los residentes, esta información mal utilizada y en manos equivocadas puede representa un riesgo enorme para todos los residentes.
Si es que se requiere este servicio es prudente que los accesos sean muy limitados, sólo hasta la puerta, uno debe acostumbrarse a recoger su paquetes. comidas, encargos en la puerta o instruir al conserje para que así lo haga.
La comodidad no puede exponer la seguridad, más vale de nuestro departamento bajar, que una situación penosa lamentar.